Señora de las casi seis décadas
[30-06-2014 15:53:10]
Alejandro Hernández Cepero
(www.miscelaneasdecuba.net).- Hace varios años, en uno de los últimos
maquillajes de la ya anciana y languideciente "revolución" se autorizó,
entre los trabajos del sector por cuenta propia, el de Sastre que, a
punto de partida del Diccionario de Real Academia Española es, la
persona –sea masculino o femenino- que tiene por oficio el de cortar y
coser vestidos, principalmente de hombre.
Durante varios años, se les permitió el expandirse a diestra y siniestra
sin que nadie acotara ni a favor ni en contra de manera que, el que
calla, otorga. De alguna manera expandieron el antagónico ciclo de causa
y efecto más conocido como: "oferta y demanda".
Se comenzó a expender ropa importada de países cercanos lo que, en poco
tiempo demostró no sólo lo lucrativo del negocio sino que dio por
sentado que, el poderoso caudal empresarial cubano está vivito y
coleando aún después de, que la señora de casi seis décadas se entronara
en el poder, hasta convertirnos en el único país del inframundo económico.
Quedó demostrado que, siempre que prime calidad, variedad buen trato,
buena presencia tanto del personal como del inmueble la ganancia, no
estará ausente y el fantasma de la ineficiencia, la no rentabilidad y la
insostenibilidad económica será exorcizado para siempre, claro está;
cuando el ojo del amo engorde el caballo.
Ante ellos se abría un nuevo reto consistente en el alquiler y
remodelación de espacios que en algunos casos nada tenían que envidiar a
las boutiques particulares del régimen. El estado avizoró la posibilidad
de que, muchas de sus instalaciones como el Ave Fénix, resurgieran de
sus cenizas a lo que ni corto ni perezoso se hizo el chivo con tonteras.
En fin de cuentas, a posteriori del ´59 con el cuento de la
nacionalización, la hoy anciana de casi seis décadas se robó toda
empresa extranjera que, en territorio nacional garantizaba que la otrora
economía cubana fuese solvente al punto que el peso cubano –en aquél
entonces garantizado íntegramente con el oro y el cambio extranjero en
todos los activos del Banco Nacional- alcanzara varios centavos por
encima del Dólar Americano, aquí, en Cuba.
Lamentablemente varios incautos cayeron en la trampa y si en aquella
época nada impidió el magnicidio empresarial antes mencionado burlándose
de cuantas Resoluciones sobre "Derechos" Cuba hubiese firmado, hoy unas
palmaditas en el hombro bastaron para acompañar la frase: "Sorullo,
sorullo, devuelve lo que no es tuyo". Apenas les quedan días para vender
la ropa comprada sin esperanza de mucha ganancia y sin que nadie les
devuelva la inversión acometida. ¿Se repetirá la historia?
Si se me permite una sugerencia, me gustaría recetarle a la casi
sexagenaria señora llamada ¿revolución? que por favor, no le quite más
vida a sus años, póngale vida a sus años que es mejor así, quizás deje
de ser lo que hoy es: una vieja con coloretes, un maquillaje al que se
empeña en llamar ¡"reformas"!
Veremos si para el nuevo año, a lo mejor lo bueno sucede, lo que a todos
nos conviene porque, en fin de cuentas la esperanza es, lo último que se
pierde.
Source: Señora de las casi seis décadas - Misceláneas de Cuba -
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/Article/Index/53b16bc63a682e16243a743e#.U7JtDvmSwx4
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