'Me quieren quitar del medio', denuncia la delegada que pelea por la reapertura de una escuela

Sociedad

'Me quieren quitar del medio', denuncia la delegada que pelea por la
reapertura de una escuela
DDC
La Habana 14-09-2012 - 5:50 pm.

Las presiones alrededor de Sirley Ávila León, la delegada del Poder
Popular que esta semana acudió a la prensa extranjera cansada de que el
Gobierno la ignore, comienzan a arreciar.

La mujer de 53 años, que representa a una circunscripción de Limones, en
el municipio de Majibacoa, Las Tunas, denunció que las autoridades "han
pedido" a sus familiares que la "persuadan" para que abandone sus
demandas, han intentado impedir que vuelva a ser elegida y están
buscando supuestos delitos para acusarla.

"A mi hijo, que es militar (…) le dijeron que fuera a persuadirme para
que negara todo lo que había hablado y no recibiera más llamadas de la
prensa, ni de nadie, o él no podría visitar mi casa", dijo Ávila León en
declaraciones telefónicas a DIARIO DE CUBA.

"Le expliqué a él lo mismo que le he explicado a ustedes, que no estoy
diciendo mentiras, solo la verdad", añadió.

Los problemas de Ávila León, elegida tres veces por sus vecinos, y quien
se define como "revolucionaria", comenzaron nada más convertirse en
delegada, en 2005.

Un año después, pese a las trabas de funcionarios municipales y
provinciales, consiguió la construcción de una escuela en Limones, para
terminar con las caminatas de varios kilómetros que tenían que hacer los
niños de su pueblo.

Pero en el pasado curso escolar las autoridades provinciales y
municipales decidieron cerrar la escuela y enviar a los niños a centros
de localidades vecinas.

Desde entonces, la delegada ha visitado el Ministerio de Educación, ha
estado nueve veces el Consejo de Estado, y ha pedido entrevistarse con
Raúl Castro y con Ricardo Alarcón, presidente de la Asamblea Nacional
del Poder Popular.

Según una grabación difundida esta semana, no ha obtenido respuestas. En
cambio, incluso fue expulsada del Consejo de Estado y el diario oficial
Granma se negó a publicar sus quejas.

"Yo le escribí en una carta a Raúl Castro que si no me atendía en un
tiempo prudencial —y de eso hace un año ya— iría a la prensa
internacional, me costara lo que me costara, porque el mundo tenía que
enterarse de que yo necesitaba hablar con él para resolver la situación
crítica del pueblo", dijo Ávila León a este diario.

Según la delegada, en Limones hay unos 15 niños en edad escolar. Al
principio, muchos padres se negaron a enviar a sus hijos a los centros
de otros pueblos, pero al menos la mitad ha cedido ya a las presiones.

El curso pasado "dirigentes del gobierno y educación del municipio y la
provincia amenazaron a los padres que si no mandaban a los niños a la
escuela que les habían asignado los llevarían a un proceso fiscal, les
quitarían los hijos y los albergarían", dijo Ávila León. "Yo me molesté
mucho y pregunté si eso era como la operación Peter Pan que tanto
habíamos criticado en Cuba".

Arrecian las presiones

En las últimas semanas los intentos para que la mujer abandone sus
reclamos han dado un nuevo giro.

El lunes la fiscalía municipal la citó para informarle que tenía que
responder a una investigación policial.

"Todo era un manejo, una manipulación porque el lunes a las 2:00 de la
tarde era la asamblea de elección del candidato. La cuestión era que yo
no pudiera ser elegida porque tenía que responder a un proceso", dijo
Ávila León.

"Pero la gente ya había dicho que no iba a asistir, y es verdad que no
asistieron, tuvieron que suspender la asamblea", añadió.

El centro de la "investigación" contra la delegada es un televisor.

Según su relato, familiares discapacitados recibieron hace tres meses de
Bienestar Social el "derecho" a comprar un televisor viejo LG que habían
quitado de una escuela e incluso "estaba roto (…) y no tenía antena y ni
mando".

"Un televisor para salir de un problema, dárselo a los infelices", dijo
Ávila León.

Agregó que el aparato costaba 386 pesos, más el mando y la antena, pero
el padre de familia (discapacitado físico) tiene una pensión de poco más
190 pesos y decidió que no podía comprarlo.

Ávila León dijo que ella le propuso darle un televisor en blanco y negro
que poseía a cambio del derecho a comprar el televisor, "para que no se
perdiera", y el hombre aceptó.

Las autoridades afirman ahora que la familia de discapacitados tiene una
"tutora legal" que era quien debía tomar las decisiones sobre el
televisor y acusan a la delegada de aprovecharse del caso.

"Se han dedicado a hacerme una cacería de brujas buscando a ver qué
delito, qué posibilidades tienen de sacarme del medio, y lo único que
encontraron fue eso", dijo Ávila León.

Sañaló que el gobierno municipal ha intentado otras opciones como la de
dividir la circunscripción "para aislar a la gente".

Además del reclamo por que se reabra la escuela, la delegada de Limones
se ha enfrentado a los funcionarios locales por otros temas que afectan
a los campesinos, como los impagos por parte del Gobierno.

"Desde el 2005 que soy delegada vivo fajada con el gobierno en todas las
asambleas, abiertamente (…) defendiendo los derechos principalmente de
los campesinos por los impagos, porque le dejan podrir las producciones,
no las recogen y después no se las pagan, no les importa nada", dijo.

"Los campesinos se pasan un año para producir y cuando llega el momento…
de qué viven. Los precios que paga Acopio son bastante bajos y los
impuestos son bastante altos, prácticamente se trabaja para pagar
impuestos y así y todo les dejan perder las mercancías", añadió.

El corresponsal de DIARIO DE CUBA Alberto Méndez Castelló intentó el
miércoles viajar a Limones para entrevistar a Sirley Ávila León, pero
fue detenido y enviado a la Unidad de Instrucción Policial de Las Tunas.
El régimen lo acusa de supuesto "desorden público".

http://www.diariodecuba.com/derechos-humanos/13018-me-quieren-quitar-del-medio-denuncia-la-delegada-que-pelea-por-la-reapertura-