Orlando Zapata Tamayo fue detenido en marzo de 2003, y en mayo de 2004
fue condenado a tres años de prisión por "desacato", "desórdenes
públicos" y "resistencia". Posteriormente fue sometido a varios juicios
por cargos adicionales de "desobediencia" y "desórdenes en
establecimientos penitenciarios", el último de ellos en mayo de 2009.
En el momento de su muerte cumplía una condena total de 36 años de
prisión. Su único delito fue trabajar por los derechos humanos en Cuba.
El hecho de que Orlando Zapata Tamayo, al verse ante una pena de prisión
tan prolongada, sintiera que el único camino que le quedaba era matarse
de hambre como protesta constituye una denuncia terrible de la constante
represión que sufren los disidentes políticos en Cuba.
Orlando Zapata Tamayo era uno de los 55 presos de conciencia adoptados
por Amnistía Internacional en Cuba. La mayoría formaban parte de las 75
personas detenidas durante la oleada masiva de represión emprendida por
las autoridades en marzo de 2003 contra los activistas políticos. En
Cuba, sin un poder judicial independiente, los juicios son a menudo
sumarios e incumplen gravemente las normas internacionales sobre juicios
justos; una vez dictada la sentencia, las posibilidades de apelar son
prácticamente nulas.
Por otra parte, el embargo del gobierno estadounidense también repercute
de forma negativa en el ejercicio de los derechos humanos de los
cubanos. Sin embargo, esto no justifica un sistema legal represivo que
restringe las libertades fundamentales en un grado que supera con creces
lo que permiten las normas internacionales de derechos humanos sobre la
protección de la seguridad nacional y el orden público.
Es hora de que el Gobierno cubano ponga fin a todas las formas de
hostigamiento e intimidación dirigidas contra disidentes que sólo
pretenden ejercer de manera legítima sus derechos humanos fundamentales.
Exige al Gobierno cubano la liberación, inmediata e incondicional, de
todos los presos de conciencia.
¡Actúa!
http://www.es.amnesty.org/actua/acciones/cuba-expresarse-libremente-puede-llevarte-a-la-carcel/
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