Editorial: Nuevos impuestos en Cuba son vieja expropiación comunista
"El dinero que los trabajadores podrían ganar en salarios que reflejen
el verdadero valor de lo que hacen, ahora va al Estado y sus programas
"gratuitos".
noviembre 30, 2012
Nuevos impuestos en Cuba son vieja expropiación comunista
Editorial
Investor's Business Daily, 28 de noviembre, 2012
Tiranía: Los medios de comunicación elogian a Cuba por obligar por
primera vez a sus empobrecidos ciudadanos a pagar impuestos, lo cual
describen como una medida "moderna" y "orientada al mercado". En
realidad, es sólo una nueva forma de robo aplicada por la dictadura de
siempre.
Leyendo a Reuters, se podría pensar que Cuba, una brutal dictadura
comunista de 53 años, ha sido un paraíso libre de impuestos para sus
afortunados ciudadanos."La mayoría de los cubanos no ha pagado impuestos
durante medio siglo, pero eso va a cambiar con un nuevo código a partir
del 1ro de enero",endulza el servicio de noticias, y precisa que los
nuevos impuestos a las ganancias privadas comienzan cerca del 35%.
De acuerdo, son nuevos, pero en modo alguno son los primeros: en
septiembre pasado, el régimen decretó punitivos aranceles aduaneros,
cobrando 4,55 dólares por cada libra de exceso de equipaje a los
expatriados cubanos que llevan suministros a sus familiares con pequeños
negocios.
"Las reformas de libre mercado del Gobierno introducidas en los últimos
dos años fueron diseñadas para fomentar las pequeñas empresas, la
agricultura privada y la iniciativa individual", escribe Reuters, y
agrega: "Bajo el nuevo código tributario el Estado espera obtener su
parte de las ganancias".
¿Su parte? Los cubanos ganan alrededor de 19 dólares al mes, un salario
de esclavos, medido por cualquier parámetro. Hacen el mismo trabajo que
otros latinoamericanos, a menudo con más destreza. Sin embargo, para su
único empleador, el Estado, sus quehaceres sólo valen 19 dólares, en una
implícita expropiación de su verdadero valor de mercado.
Y no lo dude, así lo ve el Gobierno: Fidel Castro, el dictador cubano,
incluso le dijo a una destacada profesional de la medicina, la Dra.
Hilda Molina, que no podía abandonar el país porque la formación que
había recibido del Estado convertía "su cerebro en propiedad estatal".
Reuters señala amablemente que el Gobierno "impuso algunos impuestos
dispersos, pero en buena parte prefirió mantener los salarios bajos para
poder financiar servicios sociales gratuitos".
Ese es justamente el quid del asunto: que el dinero que los trabajadores
podrían ganar en salarios que reflejen el verdadero valor de lo que
hacen, si tuvieran la libertad de elegir a sus empleadores, ahora va al
Estado y sus programas "gratuitos". Oficialmente o no, es una plusvalía
muy superior al 99%.
Y ¡qué sorpresa!, los hermanos Castro han amasado casualmente fortunas
personales de miles de millones de dólares, de acuerdo con los últimos
cálculos de la revista Forbes. Eso entraña una enorme cantidad de impuestos.
Lo que la dictadura de los Castro está procurando es embolsillarse el
dinero de las nuevas empresas supuestamente independientes que ha
autorizado, con el propósito original de reducir las infladas nóminas
estatales.
Lejos de ser una modernización o una liberalización de libre mercado, el
aumento castrista de los impuestos no es más que una extorsión a los
negocios privados que pujan por crecer, y un esfuerzo por reafirmar el
poder del Estado sobre sus ciudadanos.
Una medida en extremo comunista, que no va a funcionar.
http://www.martinoticias.com/content/article/17124.html
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