estimulan el oportunismo
Miércoles 14 de Julio de 2010 12:03 DDC/Agencias
El académico cubano Esteban Morales, separado del Partido Comunista tras
publicar un artículo sobre los peligros de la corrupción —incluida la de
altos funcionarios— y su impacto en el sistema de la Isla, considera que
sanciones como la que le han impuesto constituyen un gesto negativo que
estimula el oportunismo, informó la AP.
En un nuevo texto, titulado El misterio de la Santísima Trinidad,
Morales afirma que la medida disciplinaria que se le impuso "transmite
un mensaje a la intelectualidad revolucionaria, a la masa partidaria y a
la izquierda en general" de "que es preferible quedarse callado,
practicando el oportunismo y haciéndole el juego a lo mal hecho".
Si "lo que se hace es someter al autor a un proceso de sanción y
separarlo de las filas del Partido, sin tener en cuenta su historial de
sostenida e incondicional fidelidad a la Revolución por más de 50 años,
buscando con ello, al parecer, dar un escarmiento, se hace daño al
Partido y al país", dice.
El nuevo artículo fue publicado por Morales en su blog personal y
replicado por la página Kaosenlared.
Académico del Centro de Estudios sobre Estados Unidos, reconocido por su
participación como columnista en medios de prensa oficiales, Morales
apeló su expulsión del PCC, mientras sus compañeros rechazaron la medida
disciplinaria.
A juicio del académico, el mensaje que envía la sanción, "no tiene nada
que ver con lo que debe ser el espíritu crítico, que debe primar" en una
organización como el PCC "ni lo que la situación interna actual requiere".
Corrupción, crisis económica y disidencia
El artículo que llevó a su separación del PCC, titulado La corrupción
¿la verdadera contrarrevolución?, fue publicado en abril en la página de
internet de la oficialista Unión Nacional de Escritores y Artistas de
Cuba. Morales advertía en él que los robos, tanto en pequeña escala como
por parte de altos funcionarios del gobierno, y el aprovechamiento
personal de los recursos colectivos, representan un peligro mayor para
la revolución que la disidencia interna.
En el texto publicado en Kaosenlared, Morales insiste en que "la
situación política que Cuba atraviesa hoy tiene su origen en problemas
internos y no se debe ni a la disidencia contrarrevolucionaria, ni a los
ataque mediáticos externos", sino a las "propias dificultades y
deficiencias" del país, "ligadas fundamentalmente, al deterioro de la
economía, al descontrol, a las ilegalidades, al mercado negro y a la
corrupción".
"Todo ello, ha tornado la dinámica social actual como más difícil que la
vivida durante el llamado periodo especial, en que la crisis, aunque
profunda, estaba circunscrita al marco económico. Ahora, sin embargo, se
observa un deterioro de la situación social y política como nunca antes
se había visto", opina. Pone como ejemplo que el último Primero de Mayo
"ha sido el peor de toda la historia revolucionaria, ya que la
asistencia al desfile fue muy inferior a la acostumbrada" y se observó
"algo inédito, como carteles que manifestaban consignas que, aunque no
eran contrarrevolucionarias, no habían sido orientadas" por la CTC
(Central del Trabajadores de Cuba, sindicato único y controlado por el
gobierno).
Para Morales, "la clave" de los problemas de la Isla está en que la
economía "manifiesta una incongruencia muy seria, entre la actividad
laboral, el nivel de los salarios que se reciben y los precios de los
productos, a veces inaccesibles, lo que provoca un insuficiente nivel de
satisfacción de las necesidades apremiantes de la vida cotidiana, para
una gran masa de la población y que se refleja en todo el resto de las
relaciones sociales y la convivencia diaria".
"Sería ingenuo siquiera imaginar que esas realidades negativas las
observamos sólo los cubanos de adentro. Nuestros enemigos de adentro y
de afuera también las observan y más que observarlas, las registran
continuamente, tratando siempre de tergiversarlas y magnificarlas", dice.
"Es hora ya de que nuestro gobierno acabe de poner en práctica las
medidas que se están analizando y que la población comience a sentir que
la relativa quietud, que ha caracterizado nuestra situación en los
últimos más de tres años, va dando paso al movimiento", señala. "El
pueblo ha admitido siempre mejor la rectificación de errores que la
carencia de acciones para cambiar una situación", opina.
"La población no entiende por qué, en medio de una situación tan
crítica, no hayan sido tomadas las medidas necesarias para revertirla",
indica Morales. "Tan confusa situación ha dado lugar a especulaciones de
la población, especialmente a aquellas que atribuyen la falta de medidas
al hecho de que dentro de la máxima dirección del país existen
contradicciones sobre qué hacer", advierte.
Las peticiones de paciencia de Raúl Castro son "políticamente
desafortunadas"
Morales califica de "políticamente desafortunadas" las declaraciones del
general Raúl Castro llamando "a no apresurarse" y afirmando que "la
impaciencia es producto del desconocimiento sobre lo compleja que es la
situación".
"Tiende a dar la impresión de que no hay conciencia en el gobierno de
las privaciones que sufre la población", dice.
"Ese es el contexto en el que la corrupción agrava las cosas —alerta el
académico—, al agregar, sobre las dificultades ya existentes, una imagen
de que, a partir de las posiciones que ostentan algunos por sus cargos,
en la estructura estatal y de gobierno, se roba, malversa y se vive por
encima de las posibilidades".
"En cada barrio se sabe quiénes son los corruptos, quiénes tienen
privilegios inadmisibles, quiénes viven por encima de sus sueldos,
quiénes no padecen lo que de común está padeciendo la gente del pueblo",
afirma.
En cuanto a la disidencia, dice que "no tiene arraigo en el pueblo, que
es en general revolucionario y antiimperialista o antiyanki, al menos".
"Pero ese mismo pueblo, que la disidencia no logra mover ahora, sí se ve
afectado por un ambiente de corrupción, desconfianza en la dirección del
país e inmoralidades en el manejo de sus recursos (porque los recursos
son del pueblo, y eso no es sólo discurso) en medio de un ambiente de
crisis económica, no superado, se desmoraliza y aflojan su resistencia
en el combate político a la disidencia, la cual se aprovecharía muy bien
de ello dentro de ese tipo de ambiente social", añade.
Explica que por eso, el fundamento del artículo que llevó a su
separación del PCC fue que "sin considerar no importante a la
disidencia, es ahora la corrupción la verdadera contrarrevolución".
Sobre ese artículo, Morales dice que "no pretendía desviar la atención
de la cuestión de la disidencia, ni de la campaña mediática contra Cuba".
"Simplemente no le otorgaba a esos asuntos la primera prioridad, y
centraba su interés en lo que considero lo fundamental ahora: la
corrupción y la política de Obama hacia Cuba, que se dan la mano en
algún punto, que aún no identificamos plenamente, pero que nos
inclinamos a pensar que está en alimentar la corrupción y seguirle
creando un ambiente de silencio para que avance", explica.
Kaosenlared es una página con sede en España publica textos de
periodistas y figuras de la izquierda en América Latina.
Pedro Campos, colega de Morales y quien trabajó en el mismo centro de
investigaciones, indicó semanas atrás que la decisión de separarle del
PCC había partido de una instrucción dada por el Comité Municipal del
Partido al grupo de militancia del académico, pero que éstos rechazaron
la medida por considerarla excesiva.
No hay comentarios:
Publicar un comentario