Guantánamo se quema
Caminar de día por la ciudad es un martirio. Tal incordio es una
consecuencia de la tala o poda indiscriminada de árboles
lunes, noviembre 30, 2015 | Roberto Jesús Quiñones Haces
GUANTÁNAMO, Cuba.- Guantánamo es una de las ciudades más tórridas de
Cuba. A pesar de esa característica tiene calles como Ahogados,
Bartolomé Masó, Calixto García y Pedro A. Pérez en las que no existe un
solo árbol, a veces en varios kilómetros.
Caminar en tales condiciones entre las once y la una de la tarde es un
martirio. Tal incordio es una consecuencia de la deforestación y de la
tala o poda indiscriminada de los árboles, un mal que no es exclusivo de
la ciudad del Guaso y que ha sido reflejado en varias ocasiones en la
sección Cartas a la Dirección, del periódico Granma.
Otras calles que tuvieron árboles han quedado desprovistas de ellos. En
el 2001 fue talado, para consternación de los vecinos y de no pocos
guantanameros, el emblemático jagüey que estaba ante el Club Piccolo.
Era un árbol majestuoso que cobijó a muchos enamorados y transeúntes
pero un día a alguien con poder le molestó que las garzas descansaran en
sus ramas y eso fue suficiente para dictaminar su muerte.
Después fueron talados los aerolitos de las calles Carlos Manuel de
Céspedes y Paseo así como las majaguas de esta última con la
justificación de que estaban destruyendo las aceras. Por esa misma fecha
tumbaron la ceiba centenaria que estaba en la calle Martí y la avenida
Camilo Cienfuegos y otro jagüey enorme que estaba en la misma avenida y
la calle Máximo Gómez. Esta vez alegaron que ambos servían de cobija a
las auras tiñosas.
Ni siquiera el parque José Martí se libró en esa fecha de la furia de
los depredadores y sus árboles fueron podados de forma tal que la
indignación de los guantanameros fue expuesta sin tapujos en el primer
número de la revista independiente de cultura y sociedad Arabescos de
Guantánamo y hasta en la prensa oficialista, que ya es mucho decir.
Las consecuencias y las soluciones
Paseo se extiende en sentido este-oeste (y viceversa), aproximadamente
unos 2.5 km. Después del paso del huracán Sandy fueron eliminados los
aerolitos y las majaguas que proveían de sombra y belleza a esta
calle, una de las principales de la ciudad. Ahora es un martirio caminar
por Paseo, sobre todo en horas cercanas al mediodía.
Tanto en dicha calle como en Carlos Manuel de Céspedes, los aerolitos
fueron sustituidos por ficus. En la calle Martí se sembraron palmas.
Pero las plantas resultan todavía insuficientes ante la inclemencia de
la canícula. Incluso se aprecia que algunas de las palmas amenazan con
sus penachos el tendido eléctrico.
El pasado jueves 12 de noviembre este reportero sorprendió en plena
labor a Ángel Luís Martínez y a Elpidio Ilizástigui, trabajadores de la
Empresa Municipal de Servicios Comunales, quienes estaban podando los
ficus en la calle Paseo entre Pedro A. Pérez y Martí.
Ambos coincidieron en que fue necesario eliminar los aerolitos y las
majaguas porque estaban destruyendo las aceras. Estiman que haberlos
sustituidos por ficus fue otra buena decisión pues estos árboles son
majestuosos y pueden alcanzar hasta los 20 metros de altura sin que sus
raíces destruyan las aceras. Sin embargo, según Ángel Luís, lo
planificado es que nunca lleguen hasta la altura de los cables del
tendido eléctrico ni obstaculicen la lectura de las señales de
tránsito, algo que impedirá que los árboles apenas rebasen los dos
metros de altura.
Ante una observación nuestra acerca de que los ficus ya tenían alrededor
de tres años de haber sido sembrados y no se apreciaban resultados
favorables los trabajadores reconocieron que en ocasiones las podas no
se habían hecho correctamente y que también incidían las indisciplinas
sociales pues no existe en la ciudad una cultura de respeto al entorno.
Alrededor del parque
El parque José Martí, desde su construcción, es uno de los mayores
puntos de confluencia de la ciudad. Situado en el centro del casco
histórico es un lugar donde el caminante puede escapar del calor y
echar alguna parrafada con otros lugareños.
Ni siquiera él se libró a finales del 2013 de una de las podas más
despiadadas hasta ahora presenciadas por los guantanameros. Muchos
aseguran que ésta fue la causa de que se secara la ceiba sembrada por
los veteranos de la guerra de independencia y los estudiantes el 20 de
mayo de 1950, la cual sustituyó a la que se sembró en el mismo lugar a
las 12 del día del 20 de mayo de 1902.
Los culpables de esta poda, según las autoridades de Comunales, fueron
los miles de pájaros que en esta zona del país se conocen como
choncholíes y en otras como negritos o totíes y que todas las tardes
buscan refugio en los árboles del parque. Pero los orígenes de esa
historia y la tenacidad de estos animalitos ya tuvieron su reportaje.
Source: Guantánamo se quema | Cubanet -
https://www.cubanet.org/actualidad-destacados/guantanamo-se-quema/
lunes, 30 de noviembre de 2015
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