2010-02-23.
Héctor Julio Cedeño Negrín, Periodista Independiente de Cuba.
(www.miscelaneasdecuba.net).- Ciudad de la Habana, febrero de 2010.-
Ciertamente a los gobernantes cubanos les cuesta trabajo vivir en la
realidad. Esa sería la lógica conclusión de cualquiera que analice la
actuación de los dictadores, asentados por más de cincuenta años en Cuba
por la fuerza militar.
Como es posible que una dictadura, que trabaja en los burocráticos
trámites necrológicos, siga pensando que el Gobierno de los Estados
Unidos, legitimará de alguna forma o manera a un innegable régimen
militar, con notorios vicios fascistas y que sólo espera por el
imprescindible enterramiento, físico y efectivo, de sus envejecidos,
decrépitos y carcomidos dictadores.
Mucho antes de que eso ocurra, estoy seguro que los norteamericanos
demolerían su estatua de la libertad y la echarían al fondo recóndito
del océano.
Para que hacer eso exactamente en el momento en que está al pasar por el
Caribe, el carretón de la recogida de los desechos inservibles de la
historia, que felizmente, se los llevará para siempre.
No se darán cuenta los sátrapas y sus satrapitas, que a ellos solamente
les queda el más profundo descrédito, el imprescindible despreció y el
olvido del pueblo de Cuba, o pensarán que existe vida para semejante
laya más allá de la negra y tétrica muerte.
Eso se desprende de sus ideas planteadas para una posible negociación
con los Estados Unidos, donde incluyen un montón de condiciones
absurdas, infantiles y aberrantes, que bosquejan como un problema de
Estado, incluso, a sus cinco espías.
Quien les dijo a ellos, que al pueblo cubano les interesan sus cinco
acólitos, apresados, apestados, encarcelados y condenados, más que para
burlarse de su tonto papel, cuando ellos mismos son parte, de la
aborrecida satrapía.
Una salvedad en el griterío, resulta que ahora en la propaganda por sus
agentes confinados han cambiado la imagen de las caras, a las del medio
cuerpo ante la burla popular de llamarlos "Las Cinco Caritas de
¡Volverán!", ya le encontrarán la variante popular al cambio efectuado.
Una vez más la dictadura castrista intenta suplantar al pueblo cubano,
que verdaderamente los detesta y los desprecia de forma abrumadora.
Atrévanse los funestos tiranos, a permitir que algún organismo
internacional, de confiable garantía e imparcialidad, realice un
plebiscito o una elección libre, directa y secreta y se darán cuenta,
que los actuales déspotas serían evidentemente y abrumadoramente los
apestados. ¡Fuera la dictadura de las tierras de Cuba!
ANACRONISMO DE UNA DICTADURA DESGASTADA Y DESFASADA - Misceláneas de
Cuba (23 February 2010)
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=25871
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