La era de la subvención norteamericana al castrismo
[02-02-2015 07:41:26]
Rogelio Matos
(www.miscelaneasdecuba.net).- Recientemente asistí a una conferencia en
Miami donde escuché repetidas veces que el drama de Cuba es un problema
entre cubanos, que tenemos que resolver los cubanos solamente.
Es una visión sublime y en muchos casos sincera. Pero la realidad es
que no podemos ignorar la injerencia extranjera en Cuba, porque de lo
contrario nos convertiríamos en cómplices de los intereses políticos y
económicos que han guiado y continúan guiando las relaciones de la
mayoría de los gobiernos con el régimen castrista.
En primer lugar, hoy no se puede hablar de Cuba sin hablar de Venezuela,
porque no se puede resolver, negociar, separar un problema del otro. Es
como intentar curar un cáncer extirpándolo parcialmente con el optimismo
de que su crecimiento se va a detener, o lo que es peor con la intención
de engañar a los demás.
La verdad es que en nuestro continente los países con necesidad de
petróleo venezolano han estado más interesados en recibir petróleo
subvencionado que en defender una democracia camino a desaparecer en
Venezuela y mucho menos a una oposición en Cuba, arrinconada y
atropellada por los progenitores del chavismo.
Por esta razón la dictadura castrista es respetada y admirada por unos
cuantos gobiernos que saben que honrando a los progenitores castristas
disfrutarán de la benevolencia del primogénito venezolano.
Otros quizás con menos intereses económicos han usado el problema cubano
para demostrar su independencia de los Estados Unidos, manipulando
demagógicamente los sentimientos anti-yanqui de minorías muy activas en
sus países.
Unos y otros votan en Naciones Unidas contra el embargo americano
mientras convenientemente callan los crímenes que el régimen castrista
comete contra nuestro pueblo, especialmente contra todo aquel que exija
públicamente el respeto a los derechos humanos.
Lamentablemente el gobierno del presidente Obama, en su afán de recibir
el aplauso de los desvergonzados gobiernos latinoamericanos se ha unido
al coro de los que repiten –por conveniencias muy propias– que el
embargo es contraproducente y que ha fracasado en propiciar el cambio en
Cuba. Como si el régimen no se hubiera mantenido artificialmente por 50
años de ayuda masiva de sus aliados extranjeros.
Es como querer ignorar que la única razón que los chavistas han logrado
sobrevivir el heroico reto de la oposición venezolana volcada en las
calles, es por la combinación de la apatía de las democracias del
continente y la presencia castrista asesorando y participando en
crímenes contra demócratas venezolanos.
La realidad es que el régimen para subyugar a nuestro pueblo se ha
apoyado en más de tres décadas de subvención soviética, y unos 15 años
de subvención chavista. Ahora Castro cree que ha logrado la era de la
subvención norteamericana.
Es necesario que sigamos denunciando a los cómplices. Que los llevemos
ante el tribunal de la decencia para que sean condenados por sus pueblos
y por la historia.
Pero es más importante hacer un inventario de nuestras fuerzas y que
desarrollemos una estrategia que nos permita potenciar esas fortalezas
para lograr el apoyo de los demócratas en el mundo entero que pueden ser
solidarios con nuestro causa.
No nos engañemos. Hasta el más incauto entre nosotros sabe muy bien que
sin la presión económica y política de la comunidad internacional, los
habitantes de África del Sur todavía sufrieran del injusto y vergonzoso
apartheid.
¡La lucha continúa!
Source: La era de la subvención norteamericana al castrismo -
Misceláneas de Cuba -
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/Article/Index/54cf1c163a682e0950f8b3bc#.VM9Yo2jF9HE
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario