La Habana controla la 'actualización informática' de los cuerpos de
seguridad venezolanos
DDC
Madrid 05-09-2011 - 1:20 pm.
El diseño de las nuevas bases de datos del Cuerpo de Investigaciones
Científicas, Penales y Criminalísticas de Venezuela, que contienen el
historial de registros policiales de los ciudadanos de ese país y los
datos sobre el sistema penitenciario, está en manos de la empresa cubana
Albet Ingeniería y Sistemas, informa el diario venezolano El Nacional.
Albet, que comercializa los programas confeccionados por la Universidad
de Ciencias Informáticas (UCI), se ha convertido durante el gobierno de
Hugo Chávez en una de las mayores proveedoras de programas informáticos
para el Ministerio de Interior y Justicia venezolano, de acuerdo con el
diario.
En su sitio en internet, la empresa del Gobierno cubano señala que ha
diseñado para Caracas los sistemas de gestión penitenciaria, gestión
policial, investigación e información policial y gestión de emergencias
de seguridad ciudadana.
Los "trabajos" de Albet para el Gobierno de Chávez han provocado alarma
en los últimos meses. La empresa se ha encargado, además, de elaborar
las nuevas cédulas electrónicas de identidad de los ciudadanos del país;
lo cual, según expertos, ha dado a La Habana acceso a los datos de
millones de venezolanos y capacidad para introducir o borrar información
de las bases de datos.
Control de las prisiones
En cuanto al sistema de gestión penitenciaria elaborado para Caracas,
Albet dice en su web que permite controlar el tránsito de los internos
en las prisiones y ayudar a verificar el cumplimiento de la pena de cada
uno de ellos.
"La información permite ejecutar acciones para prevenir hechos ilícitos,
de violencia y manifestaciones de corrupción", apunta. "Contribuye a la
reinserción de la población penal al registrar su clasificación en
régimen y su caracterización social, psicológica y criminológica. De la
misma forma, ayuda a mantener el control epidemiológico y evaluar el
clima penitenciario a partir de los indicadores de gestión", agrega.
El proyecto incluye, según Albet, cámaras digitales y escáner de huellas
para identificar a presos y visitantes.
Sin embargo, el plan se ha retrasado. Tras recientes incidentes en
prisiones del país sudamericano, la Fiscalía no pudo identificar presos
fugados ni precisar la cantidad.
Fuentes de la policía científica indicaron que personal de Albet les ha
impartido entrenamientos para el manejo de una base de datos en la que
se registrarán los antecedentes policiales y el récord de delitos.
También señalaron que los cubanos están al mando de los cursos de
actualización en el Instituto Universitario de la Policía Científica. No
obstante, admitieron que los planes aún no se han concretado.
"Seguimos llevando las fichas en papel, en grandes archivos. La base de
datos sigue funcionando a la antigua", afirmó un funcionario citado por
El Nacional.
La gestión policial
Los técnicos de Albet diseñaron asimismo el sistema de gestión que está
por estrenar la policía. "La aplicación permitiría a aquellas
dependencias que no cuentan con sistemas informáticos gestionar la
información derivada de la actuación policial en la región que incumbe a
cada departamento y, al mismo tiempo, tener acceso a información
compartida", explica la empresa cubana en la página web.
"Además, se podrá identificar a cualquier ciudadano en caso de estar
presuntamente involucrado en un delito o falta", añade.
Los programas también permitirían consultar y analizar la información
almacenada por los diferentes órganos de seguridad ciudadana, para
monitorear los índices delictivos por sectores o en escala nacional.
"Con un producto de estas características se contribuye a mejorar la
seguridad ciudadana de la población, a minimizar la ocurrencia de
delitos y a brindar elementos reales a los policías para poder realizar
acciones más efectivas", concluye Albet en su presentación.
Otro de los sistemas diseñados por técnicos del Gobierno cubano fue el
de investigación e información policial (Siipol). La web de Albet dice
que "se desarrolla garantizando altos estándares de seguridad, llegando
hasta la autentificación por huellas digitales con la comunicación con
un AFIS (sistema automático de identificación de huellas dactilares)".
"A través de sus múltiples funcionalidades permite la gestión,
almacenamiento y análisis de la información policial, así como la
comunicación con sistemas informáticos de instituciones externas", afirma.
Agrega que esto ayuda a disminuir el tiempo de investigación policial al
tener procesos automatizados. "Igualmente genera información estadística
confiable y facilita el esclarecimiento de un caso investigativo,
proporcionando información actualizada y rápida".
Pero, de acuerdo con El Nacional, el sistema no parece haber llegado a
las comisarías. Funcionarios aseguran que la revisión de expedientes se
hace de forma manual.
"Para evaluar las huellas de un sospechoso tenemos que esperar hasta 15
días para que las comparen con los archivos del Saime, y las
investigaciones se retrasan", señaló un policía que pidió reservar su
nombre.
Dificultades para la atención de emergencias
El diario venezolano indicó que, en opinión del director de Emergencias
del estado Táchira, Ernesto Márquez, el software cubano para la gestión
de ese tipo de problemas ralentiza los procesos de respuesta.
Márquez dijo que en marzo recibió en su despacho una llamada del
Ministerio del Interior y Justicia en la que le informaron que las
emergencias se coordinarían de forma nacional y que se implantaría un
nuevo software para procesar las llamadas.
El funcionario afirmó que15 días después, se presentaron los ingenieros
cubanos Ramón Anglada Martínez, Wilson Alba Cal y Henry Góngora Columbié
y presentaron un programa que no se adecua a la realidad tachirense.
"Ellos hicieron una lista de sólo 10 motivos de llamadas y en la entidad
hay más tipos de emergencias porque somos un estado fronterizo. Se quedó
por fuera, por ejemplo, el contrabando de extracción", detalló.
Dijo que lo que más le preocupa es que para realizar procesos ordinarios
será necesaria la autorización del Gobierno cubano.
Márquez dijo que el software es manejado desde la Universidad de
Ciencias Informáticas pues, de acuerdo con lo que les explicaron los
ingenieros cubanos, cada vez que se requieran ajustes al programa los
funcionarios venezolanos deben hacer la solicitud al Ministerio de
Interior y Justicia, en Caracas, para que éste la envíe a la UCI y a
Albet. La solución podría tardar 15 o 30 días.
"Somos un órgano auxiliar de la investigación penal. Si la Fiscalía
quiere una solicitud urgente y la necesita como prueba, nosotros la
imprimimos, la sellamos y se la mandamos. Pero si se instala el software
cubano, habría que pedirle acceso a la Isla para que desde allá manden
la información en archivo digital y la autorización para imprimirla",
alertó Márquez.
La página web de Albet señala que entre las funciones que diseñaron
están el registro, clasificación y detección automática del número
telefónico del que se recibe la llamada de emergencia, así como los
datos del propietario y el registro de las unidades disponibles para la
atención de las solicitudes. La empresa asegura que esto permite la
generación de reportes estadísticos y también visualizar el estado o el
municipio en un mapa digital, así como el monitoreo de señales de radio
y televisión con el uso de tecnología de punta.
A pesar de las ventajas que indica Albet, Márquez considera que se
dificultará la evaluación estadística de los motivos de llamadas de
emergencias, pues el nuevo software no permite la migración de la data
que cada organismo ha acumulado durante los últimos años. "Habría que
pasarla manualmente, lo cual es imposible y perderíamos toda la base de
datos", lamentó.
Sea sobre identificación de los ciudadanos, propiedades, antecedentes
penales o estadísticas policiales, los registros venezolanos tienen en
común la conexión con La Habana, advirtió El Nacional.
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