06-09-2011.
Alexei Jiménez Almarales
Prensa Joven
(www.miscelaneasdecuba.net).- Como es habitual en el la isla de Cuba,
cada año a principios del mes de septiembre, inicia el nuevo curso
escolar. Esto despierta diferentes sentimientos, a los inocentes niños
los invade un hermoso júbilo e indescriptible alegría, al estar
concientes de que van a encontrarse nuevamente con sus amiguitos de la
escuela. Y a la vez están ajenos a los sacrificios que tienen que hacer
sus padres.
Así mismo, a los padres los invade el desespero y la preocupación. ¿Por
qué este hecho que para cualquier padre del mundo es motivo de alegría,
para el padre cubano es una época de desespero y preocupación? Porque
los padres de la isla son víctimas del estado cubano, quien los explota
largas jornadas de trabajo por un mísero salario, que no les alcanza ni
para alimentar a su familia y esta época del año les acarrea muchos
gastos, los niños para poder ir a estudiar necesitan algunos artículos
de primera necesidad.
Estos artículos de primera necesidad son excesivamente caros en
comparación con los sueldos que recibe el pueblo. Una madre comentó: "No
resisto esto, mi hija tiene que ir a este curso con los zapatos viejos
del año pasado, sólo pudimos comprarle la mochila que costo 8 CUC (200
pesos) el pago de un mes entero de mi esposo". Y una madre que es
enfermera expresó: "Tuve que hacer una cola de varias horas para comprar
el uniforme y cuando me tocó, la talla de mi hijo se había terminado"
Con esto no queremos decir que los padres cubanos no queremos que
nuestros hijos estudien, al contrario, nos emociona saber que nuestros
niños están aprendiendo cosas nuevas. Lo que los padres cubanos queremos
es que el régimen se deje de estar criticando al mundo y se ponga a
resolver los problemas que afectan al pueblo de Cuba, queremos que suban
los salarios y que con estos podamos alimentar a nuestras familias y a
la vez poder comprarle los artículos de primera necesidad a nuestros hijos.
http://www.miscelaneasdecuba.net/web/article.asp?artID=33533
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